Leer del libro "Guía de las Escuelas Cristianas", el capítulo XVII "De la Cortesía", páginas 158 a 160 (primer párrafo), págs., 231 a 234, Capítulo III y IV, págs 237 a 244 y redactar una cuartilla presentando la integración de estos elementos a la propia práctica profesional.
Última fecha de entrega: Domingo 14, 24:00 hrs.
Anónimo dijo:
ResponderBorrarSabemos que las espectativas tanto del profesor como de los compañeros pueden influir en el nivel de logro académico del alumno, pero también en la motivación y en la autoestima de éste por eso es necesario manejar el nivel de involucramiento de los alumnos en la tarea, el tono afectivo de la situación, los sentimientos de éxito e interés, así como las sensaciones de influencia y afiliación al grupo, de esta forma el clima del aula será más motivante para el aprendizaje.
Si a lo anterior añadimos una exposición de clase atractiva y participativa en la que sean visibles aspectos relevantes como: el uso de un lenguaje adecuado;patrones de interacción apropiados entre profesor y educandos; organización de actividades académicas propias que revistan la importancia de una determinada materia;manejo de contenidos y tarea relevantes; recursos y apoyos didácticos que refuerzen la temática propia; además de una forma de evaluar congruente, el alumno no tendrá que estar buscando distractores que alejen su atención de la clase, tales como hacer uso del celular,colocarse unos audifonos o pretextar continuas salidas que denotan el desinterés por la materia.
Pero, la práctica docente no sólo está dirigida hacia el logro de determinados fines educativos, sino también a la implementación de un conjunto de valores que se manifiestan en distintos momentos, por lo tanto, la labor del maestro también implica dar cuenta de sus valores personales a través de sus actitudes y de sus juicios de valor predicando con el buen ejemplo e implementando consejos acerca de la educación moral y religiosa.
De manera particular debe revisar la forma en que en el salón de clases se lleva a cabo la reflexión diaria y despertar a través de ella el interés por el contenido dando una breve explicación del mensaje que acerque al alumno al mismo y no sólo repita de manera memorizada, si ésto se hace día a día podemos asegurar que el alumno,cristiano o no, encontrará el sentido de dicha oración continua y ya no la verá como una imposición;y si ésto sucede podemos decir que el fin educativo lasallista se ha complementado
Graciela Mercado Hernández.
Un tema tan importante como el de inculcar a nuestros alumnos el habito de las buenas costumbres y la educación.
ResponderBorrarEn ocasiones es difícil ya que nos encontramos con un cúmulo de hormonas adolescentes volando alrededor nuestro, donde para ellos lo importante es ir en contra de las reglas establecidas.
Es con amor y paciencia que se logra este objetivo, es con el ejemplo como lograremos establecer que el comportamiento sea acorde con lo que predicamos, al inicio del semestre se debe de plantear las condiciones de conducta que se deberán seguir, es lógico que será difícil ir contra corriente pues cada uno tienen hábitos del hogar muy arraigados, pero considero que es parte de nuestra tarea…no solo enseñar…también educar…también amar…
No deberemos olvidar ,que se predica con el ejemplo, el expresarnos bien de nuestros compañeros maestros, el reprender a aquel alumno que habla mal de otro profesor por el simple hecho de hacer mofa de su vestir y su hablar, o el burlarse de los defectos físicos de sus compañeros, nos corresponde reprender de forma inmediata a este tipo de alumnos, no deberemos dejar pasar por alto este tipo de conducta, ya que de no hacerlo se vuelve un habito que se ira haciendo cada vez más difícil de corregir.
Es importante la oración de todos los días, es una limpieza para el alma y una forma de comenzar o continuar el día alabando a nuestro señor y compartiendo con nuestros alumnos el dar las gracias por un día más de trabajo y enseñándolos a agradecer la vida y la oportunidad de vernos de nuevo y de trabajar juntos…el mostrarles que si estamos aquí y ahora es por una razón importante….y que cada uno tienen una misión que cumplir ellos como estudiantes y amigos, y nosotros como profesores….
La discreción y la prudencia es parte de la educación que nos acompaña, es hablar cuando sea necesario y callarnos cuando nuestras palabras lastiman …es seguir aquel dicho que dice…si no tienes nada bueno que decir de alguien, mejor cállate….tenemos alumnos que se nos acercan para comentar o para criticar a un compañero o profesor..considero que es el momento de explicarles con respeto, cariño y delicadeza los problemas que se acarrean al hablar mal de los demás….y digo con delicadeza porque es difícil que a esta edad tengan confianza de expresarnos lo que sientes y estamos a un pequeño hilo de romper esta logro de comunicación…
Deberemos ser más listos que nuestros alumnos, ya que existe un marcado habito de mentir, sea sobre calificaciones, sobre compañeros, sobre profesores…con el tiempo y atención detectamos a esos alumnos para poder demostrarles que es difícil engañar al profesor y sobre todo para corregir ese habito.
Considero que las lecciones que estudiamos en estos capítulos del libro, nos dicen en resumen que es con amor, paciencia y ejemplos como lograremos hacer que nuestros alumnos sean hombres y mujeres de bien, que también es la forma de inculcarles como deberán ser siempre con su prójimo y con ellos mismos.
Es está una más de nuestras misiones, no solo nos concretarnos a dar nuestra cátedra…es también educar para vivir, es hacer presente la vida de Cristo Jesús en la vida diaria de nuestros alumnos, sobre todo es esta edad, donde ni ellos mismos saben que camino tomar, donde toman decisiones de adultos siendo aun unos niños que están pasando a ala adolescencia.
Es increíble como un libro escrito desde hace tantos años, nos muestra la práctica de vida que tenemos hoy en día.
Gracias: Miss Tere Hurtado
La cortesia es el elemento importantisimo en la vida diaria, no solo en el empleo, sino en el hogar y hasta en la calle, puesto que es una muestra de bonhomia y amor por cualquier congenere. Es necesario hacer una separacion razonada de que los buenos modales y la cortesia aparentemente son lo mismo pero hay una linea muy fina que los separa, pues se puede ser cortes sin sentir nada de corazon. Hablando concretamente de la relacion de cortesia y buenos modales con mis alumnos, jamas debo agraviarles usando la cortesia como un buen escudo escondiendo maldad y mala intencion. Para mi es importante predicar con el ejemplo demostrando que se puede ser exigente pero sin ser grosero u ofensivo. Es necesario hacerles ver que hay que ser agradecidos o tener atenciones con sus maestros y compañeros de clase. Por ejemplo, si algun compañero le hace un favor o le ayuda en sus quehaceres hay que hacer hincapie que su compañero actuo con bondad hacia el, y que por lo tanto la minima respuesta es dar las gracias y estar atento a alguna necesidad que se le presente a este o a cualquier otro amigo.
ResponderBorrarCon repecto a las virtudes y prendas del educador hacia sus alumnos este debe recordar que la imagen y acciones que el maestro provea a sus educandos las llevaran siempre en su memoria y en su corazon, y haciendo una reflexion mayor hay que pensar que ese niño o joven algun dia sera mayor de edad y que recordaran claramente lo que le vieron hacer y al haber tomado ejemplo sus acciones seran buenas. La piedad que el maestro introyecte a sus alumnos tratese de hacerles entender el amor a Dios, seguir fielmente sus mandamientos, hacerles ver que la oracion es la mejor forma de acercarse al Señor.
Otro elemento importantisimo del maestro con respecto a sus alumnos es la prudencia y la discreción. Esta ultima es la base para entender y aplicar la primera. La prudencia se usa en los casos cuando esta uno expuesto a aplicar procederes que a veces no son muy cosiderados. Por ejemplo si el maestro se da cuenta que algun alumno no guarda reglas de higiene basicas en su persona o en su ropa, entonces con prudencia el profesor señalara y recomendara al alumno, sin ponerlo en vergüenza con los demas, que el aseo personal es basico en la vida social de cualquier persona.
Los consejos o enseñanzas pueden ser numerosas pero nos contentaremos con las que el sentido comun nos aconseje.
La soberbia es intrinseca en nosotros como el sudor corporal, por lo tanto es necesario practicarla sin deterioro de nuestra personalidad, pues comúnmente se confunde con la servilidad que las personas usan como humildad. El respeto hacia un superior o el acatamiento de sus ordenes , por muy absurdas que nos parezcan tienen una razon de ser y uno no es quien para discutirlas o no acatarlas sin pensar que en ultima instancia si se comete un error acatando una orden, la responsabilidad en ultima instancia sera del superior que dicto la orden. Gracias.
que pasa con el blog.....
ResponderBorrarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarDesde que ingrese a La Salle, definitivamente mi vida a da dado un giro de 180°, la convivencia con un grupo selecto por Dios, de administrativos, maestros, y Hermanos; me han brindado un ambiente acogedor donde desde luego me siento muy a gusto. Recuerdo con amor y entusiasmo la primera vez en Tetela, cuando escuche hablar de la cortesía, de las virtudes del maestro, de la fraternidad, del acompañamiento, y de San Juan Bautista de la Salle; todo esto me fascino desde aquel día, y no ha habido un solo instante en que imitando el buen ejemplo del Santo fundador, y desde luego del gran Maestro, “luche desde mi interior” por tratar de ser un buen ser humano, un buen ejemplo, un buen padre, y también un buen Maestro. Esta labor no ha sido fácil, y no ha sido concluida aun, reconozco me hace falta mucho para ser el Maestro que mis alumnos necesitan, mucho que aprender, y mucho que comprender respecto de la humildad, la piedad, la prudencia y la discreción; pero mucho más aun que practicar.
ResponderBorrarEn la Salle, podría decir me he estado re educando, imitando lo bueno de muchos de mis compañeros y directivos más experimentados, a los cuales agradezco la cortesía con la que siempre he sido tratado, y que en la medida de lo que me es posible transmito a mis alumnos, para que ellos se sientas tan a gusto como yo, y para que juntos logremos la armonía de la clase que nos permita aprender a ser mejores hijos de Dios. Ocupándome de aquellos a los que el santo fundador se refiere como los más pobres, convencido que si los trato con amor, cariño y respeto, obtendré de ellos una actitud favorable.
En efecto los resultados quizá no sean los óptimos, pero siempre estudiar y preparar la clase, el anticipar las respuestas a las preguntas que puedan surgir, el hablar con un lenguaje sencillo, el relacionar la materia con la vida diaria del alumno, el ir presentable, limpio, el ser respetuoso, educado, etc.; bueno eso ayuda bastante, genera confianza, aprecio y también sumisión de los alumnos hacia mi persona, me da la jerarquía y el control suficiente para presentar la clase en forma clara y amena, claro desde mi punto de vista. Pero cuando les pregunto a los alumnos “como vas” algunos muy sinceros me dicen: “la verdad no he entendido nada, las matemáticas simplemente no son lo mío, a mí los números me dan dolor de cabeza, me aburren, los exámenes de mate siempre me ponen nervioso, eso para que me va a servir, ya mejor déjeme un trabajo para pasar el extra, etc.”, entonces se me cae la cara de vergüenza, y reflexiono que estoy haciendo y que más debo hacer para poder servir mejor a mis alumnos, para infundirles el gusto por el estudio, la reflexión y el carisma lasallista.
Arq. Serafín Ramírez Martínez, ssserafin@live.com.mx
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrardebe existir un metodo más eficaz para publicar directamente un documento desde pdf. ¿alguien lo conoce?
ResponderBorrarSobre la lectura que se hizo de los temas en la Guía de Escuelas Cristianas hay varias cosas que deben comentarse. Las reglas mínimas de cortesía son las que aplicamos diariamente en el salón de clases. Creo que todas las que se mencionan en el libro pueden y son llevadas a la práctica diariamente. Los maestros tenemos la obligación practicarlas en nosotros mismos, para poder así solicitarlas de los alumnos. No es posible dar lo que no se tiene, y el respetar a los alumnos, hace que ellos nos respeten a nosotros.
ResponderBorrarLas prácticas de piedad y el ejemplo que se les puede dar a los alumnos son fundamentales para poder ganarse su confianza. Todo esto repercute en mirar el mundo con ojos de evangelio. Quien tiene a Cristo en mente desde el principio y hasta el final del día, puede ver mucho más avance con sus alumnos que aquella persona que lo desconoce o ignora.
Ser maestro en un colegio lasallista es una de las mejores cosas que he podido encontrar. Siempre me he metido en problemas con otros colegios por aplicar lo que aquí es regla natural con el estudiante. Poder saber que una escuela impulsa los valores evangélicos desde el maestro hacia los alumnos, es algo que no se puede calcular, ¿cuánto bien puede hacer un profesor cuando en su programa hay valores tan importantes como la oración al inicio de la clase? Quizá no nos demos cuenta. Lo nuestro es sembrar y ser ejemplos. Ya llegarán personas que cosechen a nuestros ejemplares.
En cuanto a la prudencia, creo que el sentido común nos debe guiar en todo momento. Una de las cosas que más llamó mi atención y me parece una de las más eficaces en el tema, es el no tomar decisiones cuando se está enojado. Generalmente los maestros solemos engancharnos con algún alumno que es muy efectivo para sacar de quicio, pero siempre hay que mantener la cabeza fría, especialmente con ese tipo de alumnos. Otra cosa es no tener favoritos en el salón de clases, y más bien ser “maestro de todos” para evitar susceptibilidades en los demás compañeros.
Creo que lo más complicado de todo esto es sin duda la humildad. Tenemos compañeros que brillan por la humildad de su trato, y esto es una virtud difícil de adquirir, porque desde pequeños siempre nos han inculcado el orgullo (Si pones un huevo, cacaréalo). Los jóvenes sienten inmediatamente cuando uno pone en práctica esta virtud, ya que el trato con ese maestro lo sienten mucho más cercano. Me han parecido unas lecturas muy buenas y enriquecedoras de nuestro trabajo.
Prof. Edgar Ramsés Gallegos Ortiz.
La fomentación de la comprensión y tolerancia hacia nuestros prójimos levanta y enaltece el corazón humano.
ResponderBorrarLos seres humanos somos, por excelencia, capaces de poder distinguir cada uno de los procesos de aprendizaje, como un valor cultural: un valor agregado. Como si se contemplara una obra, cuya ficha, fuera esa verdad que la cataloga y define a priori. LA integración de estes elementos dentro de la practica de la docencia se puede realizar con un simple hecho: expresar los sentimientos y dejar que nuestros alumnos se sientan con plenitud para también expresarlos. Somos y debemos ser fieles a nuestros pensamientos para con nuestros alumnos. Una relación efímera, sólo de salón, demostrando quién es quién, no sólo afecta, sino mata cualquier acercamiento al aprendizaje. Cuando les pregunto a mis alumnos sobre cómo les ha ido, sobre sus planes, sus ideas y sueños, les estoy dando importancia, les estoy enseñando la cortesía de que "ellos" son importantes. En la enseñanza, al momento de orar, antes de la clase, los alentamos a que nunca se olviden de Dios y Jesucristo. Claro ejemplo de cada una de estas caracteristicas es en la clase, Normalmente todo permanecemos arriba en la plataforma, como una autoridad, lo somos, pero también al bajarnos sentarnos lado a lado con el alumno le damos la oportunidad de que se sienta más seguro y a lo que está aprendiendo. La reacción es clara: ellos comienza a preguntar más, sus miedos se escapan, sus pensamientos fluyen más rápido, en pocas palabras hay una reacción inmediata. En ese momento dejo de ser un profesor más, ahora me convierto en un porfesor- compañero y amigo que no sólo les enseña valores y cortesía, sino además paso a ser alguien que marcara sus vidas para guiarlos en oraciones especiales en esos momentos difíciles cuando no tengan a nadie en quien recurrir , y así, tampoco recurran nuestros alumnos a las drogas u otra adicción.
No hay mejor muestra de felicidad y de estimulación para ellos cuando compartimos como profesores nuestras experiencias como profesionales y como seres humanos, les hacemos ver que también fuímos igual que ellos, que no hay ni debe haber distinciones en el mundo. En efecto, es de suma importancia el que se prevengan de toda hipocrecia y eviten caer en malos pensamientos. Mi labor de docente día a día en la enseñanza de un idioma, no sólo es gramatical, también cultural; fundamentación de valores, ideas,religión: todo el canon linguístico de una lengua extranjera. Al conocer estos puntos, los alumnos dejan de ver esta lengua y cualquier otra como algo mezquino. No olvidemos que en nuestra labor Debemos habitar no solamente en dos mundos, también en tres, ya que creamos dos lenguas y una maás cuando estamos frente al alumno, y hacemos esto, para crear el puente necesario de entendiemiento, cortesía y piedad
Arturo Martinez Ortiz
Dese el curso de tetela comente con las maestras nuevas(igual que yo) que era fabuloso ver que las virtudes del maestro eran los mismos conceptos y compromisos con los que yo he trabajado o intentado trabajar, claro esta con diferente nombre. asi que me sentia como pez en el agua y con muchas ganas de comenzar a trabajar en la salle. Debo admitir que cuando comence es semestre, fue un cambio muy drastico, por que para los chicos el Ingles es una de todas sus materias y que aveces la calificacion es mas importante que lo que puedan saber. siendo entonces que les costo mucho trabajo adaptarse a un metodo y estrategias nuevas llevando esta situacion a una crisis alumno maestro.
ResponderBorrarafortunadamente tiempo al tiempo y los chicos ya trabajan y confian a lo cual los llevo a decirme que toda esa crisis fue insitada por una profesora de otra area a la cual le deseo que pueda encontrar paz interior y sea feliz como yo lo soy.
expreso esto, porque los adultos somos nosotros y en nosotros debe caber la sensatez. Creo que la unica forma de como docentes(con todas las caractericticas o virtudes que encierra esta palabra) dar una buena formacion a los chicos, es siendo eticos, dando el ejemplo profesionalismo, honestidad y respeto en el trabajo. Por que si bien todos; maestros y alumnos somos el reflejo de lo que pasa en casa, nosotros debemos poner nuestro granito de arena para que sean personas de "bien" .
puedo concluir que: profesor que se guia con esas virtudes es un maestro lasallista cualquiera que sea el tiempo trabajando en la salle o incluso si no trabaja en la salle, porque yo entiendo el lasallismo, como un conjunto de acciones responsables y no solo un sustantivo.
MARINA MARTINEZ VICTORIA
Acerca de la cortesia, e independientemente de verlo desde el punto de vista de ser una virtud, es una manera de mostrar nuestra educación. y debemos de considerarla nuestra máxima carta de presentación no solo con los alumnos, sino con todos y cada uno de los seres con los que convivimos a diario, es más conocidos o desconocidos.
ResponderBorrarPor otra parte, conocer y hablar de Cristo nos permitira tener una forma de acercarnos a los alumnos, de tener su confianza y respeto.
Otro aspecto importante, tiene que ver con la oración a la que a diario invitamos a los alumnos, porque permite hacerlos diferentes en comparación con otras instituciones, porque desde ese momento, al hacer oración se nota lo que es "un alumno lasallista".
Una anéctota, que se presentó al inició del semestre con un padre de familia, me hizo ver que tenía interés en que su hijo ingresará a está institución, pero al decir de ella no fue posible, pero al escuchar ella el timbre que daba por concluido el receso, expreso a un servidor, su admiración por la forma en que los alumnos en orden se dirigían a sus salones.
Finalmente debemos de estar concientes con aspectos como la humildad, la honestidad, la verdad que tanto como personas como educadores trasmitimos a los alumnos.
Miguel Sánchez Gómez
Con mi experiencia laboral no me queda duda que la influencia que trasmitimos con los alumnos tiene impacto en sus vidas.
ResponderBorrarTodas las virtudes examinadas durante la lectura son Habilidades, destrezas que se convierten en competencias docentes.
Tal como la virtud que inbulucra aspectos morales y del corazon hacen que la vida sea armoniosa; en donde el alumno lo refleja en una exacta urbanidad.
La virtud del maestro es observada por la sociedad al igual que la de los religiosos; en donde son examinados y jusgados por sus palabras y sus actos lo cual implica dar un buen ejemplo; "El cual es el mas poderoso de los medios de enseñanza". en donde la imagen del docente se ve reflejada en la conducta de los alumnos por que son la imagen del docente.
Como mediadores de dios depende de mi labor que por conviccion los alumnos tengan la piedad como virtud; que implica la parte reflexiva; en donde toda accion tiene una consecuencia ya sea buena o mala. Por ende, ellos deben realizar sus labores con interes y entusiasmo.
Las virtudes dirigidas como la prudencia y la discrección bien empleados son medios que han de conducir el fin que nos proponemos vinculados con la educacion; se refiere a realizar una planeacion dirigida con objetivos, propositos y fines concretos. Lo cual implica investigar metodos, estrategias de enseñanza adecuadas para lograr los fines de la educacion.
La humanidad es la esencia del ser humano en este caso seria el dar a conocer lo que soy.
Que implica la propia esencia del maestro como un ser humano virtuoso.
Guillermo Acosta Sanchez.
Práctica profesional-Guía de las Escuelas Cristianas-Ética laboral/Claudia Flores González
ResponderBorrarLas reflexiones de San Juan Bautista de la Salle en la Guía de las escuelas cristianas insta al profesor a seguir algunos modales y virtudes de utilidad en el trabajo práctico de aula y en la creación de ambientes propicios que resulten estimulantes en la tarea de educar. A saber estas virtudes y actitudes son: Cortesía, piedad, celo, prudencia, discreción y humildad; y por cada una se hacen una serie de recomendaciones a las que tiene que ajustarse en el papel de guía del modelo cristiano y educador.
¿De qué modo estos modales y estas virtudes se ajustan al quehacer diario del educador en el aula y entorno de La Salle Nezahualcóyotl?
Las actuales condiciones de la educación enmarcadas en el modelo por competencias piden del educador propiciar un ambiente educativo estimulante, mismo que San Juan Bautista de La Salle solicitaba en las prescripciones para una educación intelectual (generar) un “entendimiento del alumno como una potencia a excitarse”. Entendiendo el excitar una forma de despertar el interés por el conocimiento como el mejor principio de ambiente de aprendizaje.
El Santo fundador extendía su solicitud al grado de la perfección de estas virtudes, alentando al maestro a ser un ejemplo de lo solicitado, no solo en el modelo cristiano, sino moral y de responsabilidades.
Una de las más importantes es la piedad: cumplir dignamente y con amor los deberes para con Dios. De la cual es importante rescatar la convicción del ejercicio de la docencia como una práctica digna donde el ejemplo de un profesor puede trascender las instrucciones de su quehacer diario. Un profesor que hace respetar con su ejemplo un reglamento, una actitud de entrega al conocimiento y una insaciable practica por adquirir o actualizar los conocimientos en su materia u otras es de más provecho al alumno.
Conducirse con prudencia es discernir y emplear los medios que han de conducirnos al fin que nos proponemos, en palabras del señor de La Salle, y atraído a nuestra tarea el discernimiento y el empleo de los medios en tiempos actuales conlleva a tantas distracciones por lo atractivo que se presentan los medios, que vislumbrar el fin que es educar toma muchos caminos.
Las oportunidades de revestir el camino hacia el fin que es el conocimiento de atajos fáciles, de desvíos placenteros y esfuerzos breves son tentaciones constantes con que el educador se enfrenta y debe sortear para acercar al alumno al reconocimiento de su propio fin. En este sentido La Guía aconseja “combatir la pasividad intelectual, dar prioridad al desarrollo del juicio que al del conocimiento”, consejo muy práctico a seguir hoy día cuando enseñar a aprender es más importante que cubrir una currícula por un documento.
La guía nos invita a educar para la reflexión y el gusto por el estudio, lo cual atraído a nuestro quehacer diario significa poner en las manos de los que se integran por primera vez al sistema escolar de De la Salle, los métodos en clase para que el alumno se convierta en un ser crítico, reflexivo y transformador de los conflictos sociales a su alrededor por medio del valor del estudio.
Hoy en día, la sociedad en la que vivimos y el ritmo de vida tan acelerado que tenemos, hace que los padres cada vez pasen menos tiempo con sus hijos y, por ello, frecuentemente los alumnos actúan de formas incorrectas con el único objetivo de llamar la atención. Esto no es muy diferente a lo que pasaba hace 300 años cuando se escribió esta “Guía de las Escuelas Cristianas” y a la fecha continúa ofreciendo un proyecto de educación humana y cristiana de calidad.
ResponderBorrarEn muchas ocasiones, la falta de atención y afecto que sienten los alumnos en casa, les lleva a buscar atención de parte de su profesor(a), aunque para ello tengan que portarse mal. En ese momento adquirimos otro compromiso cuando los atendemos ya que nos convertimos en el ejemplo que ellos han de ver y seguir en la escuela y tal vez para una vida futura. Por eso es que debemos tener cuidado desde nuestra presentación personal, acciones, disciplina, puntualidad, responsabilidad, cortesía, humildad y sobre todo una buena comunicación con ellos. Esto es lo que ellos buscan y lo llamaría un compromiso de ser más “persona”. Esto es una decisión interna en donde actúa nuestra calidad moral.
Hay una frase de Rosa Jové que dice “Quiéreme cuando menos me lo merezca, porque será cuando más lo necesite” o lo que es lo mismo: "intenta ponerte en mi lugar porque yo también lo estoy pasando mal". Sí, tenemos que saber también cómo identificar estos síntomas.
Es por eso que es importante cuidar que los alumnos se acerquen a Dios por medio de la oración, haciendo alusión al Maestro de maestros...Jesús: siguiendo sus cualidades de Humildad, Paciencia, Conocimiento, Cortesía, Discreción y sobre todo Respeto.
Esto no quiere decir que seamos perfectos, sino simplemente que usemos un buen sentido común siguiendo los reglamentos de nuestra institución, una institución de vanguardia en el área de calidad de formación humana; rescatando los valores ausentes en la familia entre alumno-maestro-padre de familia.
Debemos evitar la autoridad mal entendida: tanto la soberbia y la coacción. Subvalorar a los alumnos, no escucharlos, no responder a sus preguntas, decirles que algo es así porque es así y se acabó
En fin, todos hemos sido alumnos, hay que inspirarse en aquellos maestros que nos han marcado positivamente de por vida.
Tenemos una gran tarea: formar alumnos que aprendan a vivir de una manera responsable, honesta y respetuosa en nuestra sociedad.
“Enseñar no es transmitir ideas a otro sino favorecer que el otro las descubra”
Ortega y Gasset
Alejandra Hernández Fuentes
ACTIVIDAD N° 3
ResponderBorrarEn la guía de las escuelas cristianas San Juan Bautista de La Salle nos remite a la cortesía como parte fundamental en la relación que tenemos días con día con los demás, refiere que ésta hace las relaciones más fáciles y agradables y que al hacerlo estamos obligados a desechar nuestro egoísmo, basados en una educación moral para guiar a nuestros alumnos a una correcta urbanidad.
Entiendo que San Juan Bautista de La Salle nos remite a ser ejemplo para nuestros alumnos, congruentes en nuestro decir y actuar. Habla él de esta como una de las principales virtudes del maestro.
Asimismo, nos llama al discernimiento al momento de conducirnos a través de la prudencia, en el entendido que la discreción deriva de la prudencia; establece de esa moderación como esa capacidad de dar espacios a la reflexión con el fin de estudiar las consecuencias que pueden traer nuestros actos no razonados.
Nuestro Santo Fundador nos invita a la piedad para cumplir con dignidad y amor nuestra labor docente. “Piedad” dice para cumplir con dignidad las tareas para con Dios.
¿De qué manera estos elementos forman parte de mi práctica docente?
Considero que todos los días se debe predicar con el ejemplo, de una u otra forma los jóvenes se identifican con los profesores por ciertas características que los primeros poseen, por eso mismo la congruencia lleva a no cometer imprudencias que revistan en un ejemplo negativo.
La prudencia nos lleva a encontrar las formas para conseguir el fin que nos hemos propuesto, en el entendido que deben ser los medios más adecuados a fin de conseguir la atención de nuestros alumnos y, por ende, el gusto por el aprendizaje en tiempos en que éste ha dejado de importar a muchos. La enseñanza que ayude a los jóvenes a despertar su intelecto, en aras de formar personas críticas y reflexivas capaces de dar respuesta a los procesos sociales, políticos, económicos y culturales de la realidad en la que se encuentran inmersos.
La tarea en sí misma no es fácil, es por eso que es necesaria la constante actualización para capacitarnos y encontrar los mejores medios para guiar a los jóvenes a la consecución de lo anterior. Sin embargo, no sólo una capacitación profesional, sino una reflexión moral que nos lleve a vislumbrar las necesidades de nuestros estudiantes y guiarlos por el mejor camino y a la búsqueda de Dios.
"Con unas leyes justas y una administración eficiente, se consigue aumentar las rentas del reino; con buenas enseñanzas y buenos ejemplos, se conquista el corazón de los súbditos." Kung FuTse, Confucio
Andrea Flores González
Yo creo que en la práctica diaria, la cortesía (de modales y esto nos lleva a las del corazón) a veces la confundimos con el activismo. Para complementar estas lecturas me puse a leer parte del material que nos obsequiaron en la casa de Tetela en este año que fuimos y ahí encontré lo siguiente:
ResponderBorrarLa formación de los maestros noveles se resume en dos puntos:
1. En quitar a esos maestros noveles lo que tienen y no deben tener
2. En darles lo que no poseen y es muy necesario que posean
El activismo es una de las cosas que hay que desarraigar en los maestros noveles ( y no tan noveles), dice en la lectura que aunque no sea siempre conveniente estar en la escuela como una estatua sin acción y sin movimiento, tampoco es conveniente ser demasiado activo y demasiado apresurado. Es preciso evitar ambos excesos, uno ocasiona que los maestros no tengan suficiente vigilancia e influencia y el otro les quita toda su autoridad y les atrae el menosprecio de todos sus escolares. ¿Cuántos de nosotros tenemos este activismo con nuestros compañeros de trabajo, alumnos, directivos, administrativos, etc.? Esto me lleva a la siguiente pregunta ¿Cuántos de nosotros tenemos un aprecio real y sincero hacia quienes nos rodean?
Como dar respuesta a las preguntas anteriores, he aquí una de ellas: un individuo (llámese director, maestro, alumno, etc.) es cortés si sabe olvidarse de sí mismo, y prever lo que puede agradar al prójimo. Es una respuesta muy contundente y difícil de lograr. Cuando estoy en clase hago una sesión de problemas grupal, después en equipo (4 o 5 integrantes) y después en parejas. Cuando es grupal, los alumnos saben que hay chicos que sobresalen en mi materia y esperan que ellos les ayuden con la solución de estos problemas, cosa que efectivamente sucede y de esta forma tanto unos como otros salen beneficiados, los que saben ponen ese conocimiento a disposición de los demás con lo cual muestran humildad (por fortuna, si acaso 1 o 2 de ellos de repente quiere tomar este activismo para hacerse visibles, egoísmo) y los otros se sienten agradecidos pero sin sentirse ofendidos. Por lo tanto, los alumnos muestran cortesía, no solamente en mi materia sino en todas las demás, pues hay que recordar que hay alumnos que no son hábiles en mi materia pero que destacan en algunas otras y entonces se les enseña a ser recíprocos.
Daniel Valerio Martinez
Ahora, como el mismo texto lo explica, la cortesía se inculca, se transmite, se promueve, pero tiene más efecto que quien lo promueve lo lleva a cabo, en la vida diaria, a cada instante, y en este aspecto creo que no tengo que bajar los brazos, al contrario, tengo que redoblar esfuerzos.
ResponderBorrarEn cuanto a mis compañeros maestros, creo que a partir de estas actividades la cortesía ha salido a relucir, a cuántos de ellos los he visto apoyando al otro, mostrando siempre un trato cordial, preocupándose por el otro y dejando de lado el egoísmo. Creo que algunos hemos notado estos cambios y me siento contento por ello.
En cuanto a la prudencia, dice el texto que hace discernir y emplear los medios que han de conducirnos al fin que nos proponemos; considero que cada uno de nosotros lo lleva acabo, cada materia es diferente y cada uno de nosotros emplea medios para llegar al fin deseado, como me dio cuenta de ello, pues cuando comienza el semestre, y hoy en día más, con el concepto de competencias que impone la SEP, la mayoría de nosotros discutimos el contenido de ellos y por ello discernimos que hay cosas que si pueden funcionar y otras nada que ver.
En cuanto a la discreción, como lo dije en la actividad pasada, si somos autocríticos, la discreción ni se nota, ni de aquí para allá, ni de allá para acá, pero para ser autocríticos la humildad debe imponerse
Daniel Valerio Martinez
Es importante resaltar que desde que San Juan Bautista de la Salle escribió la guía de las escuelas cristianas hasta la actualidad los principios, pedagogías y éticas (virtudes) del buen maestro no han cambiado y que desde entonces se invita al magisterio sobre todo en las escuelas cristianas a ser testimonio de el maestro más grande.
ResponderBorrarAl retomar la lectura y tratar de integrar en mi práctica docente cada punto parece como algo tan común, tan cotidiano y que siempre lo tengo presente, sin embargo sería utópico creer que todos los puntos sobre algunas virtudes del buen maetro específicamente la cortesía, la piedad y la prudencia las aplicaramos como un recetario cuando la realidad aún cuando se intenta no siempre es así. Razones que semejan justificaciones, ya que si realmente evaluaramos nuestras virtudes creeríamos que efectivamente las practicamos correctamente, pero que pasa cuando otra persona (alumno , compañero o autoridad) nos hacen ver que no es así ¿Somos capaces de aceptarlo (ser humildes) y corregirlo? o somos indiferentes.
Al leer el cápitulo sobre la cortesía y algunos puntos a los que invita De la Salle al educador cristiano como son el simple saludo,dar gracias y proclamar al respeto creo que es lo mínimo que me permite dirigirme a mis alumnos.
En relación a las virtudes del maestro, piedad, celo, prudencia, discreción, humildad, paciencia, mansedumbre, firmeza, constancia, gravedad, silencio, vigilancia,cordura, saber y generosidad, todavía sigo aprendiendo, ya que estudiarlas y comprenderlas no es suficiente hay que practicarlas y sin embargo, por diferentes razones o situaciones en la práctica cotidiana no siempre es posible, es difícil.
Por otra parte, el tener presente que ser buen cristiano nos permite invitar y contagiar con el ejemplo los valores, a los que estan a nuestro alrededor no sólo a nuestros alumnos, y que en la escuela no es una tarea exclusiva de las materias de formación de valores y ética, sino de toda la conunidad, cuya responsabilidad es muy grande y no debemos descuidarla.
Esta lectura me ha permitido hacer conciencia de la gran responsabilidad que tenemos, que lo más valioso siempre será recordar que somos un medio de Nuestro Señor para dar testimonio del amor tan grande para nosotros y que si además. de ser formadores de personas academicamente y en valores,crecemos juntos logramos mayores resultados.
¡Buenas noches compañeros!
ResponderBorrarComparo con “La guía de las Escuelas Cristianas”, la importancia que tiene la cortesía, para con nosotros mismos, nuestros compañeros y para nuestros alumnos.
Nuestra labor docente ya por sí sola nos compromete a ser corteses, nuestros alumnos de bachillerato están en un proceso importante de su vida en donde la mayoría toma las decisiones que tiene que ver con su futuro.
Por otra parte, creo que el testimonio que demos es lo que más los impacta, ya que como bien se dice, “las palabras se las lleva el viento”, y lo que cuentan son los hechos.
Considerando que el testimonio que damos a nuestros compañeros y alumnos es una virtud, y como facilitadores del conocimiento también lo somos y/o debemos ser como educadores religiosos también ya que nuestros alumnos perciben todo de nosotros (habilidad para desarrollar nuestra cátedra, estado de ánimo y nuestro comportamiento para con ellos y nuestros compañeros), así mismo nuestro compromiso como Lasallistas nos hace estar más comprometidos para con todos.
De tal manera que con Piedad debemos ser imitadores del amor que Dios nuestro Padre nos da y de esta forma serlo para con todos y antes degenerar cualquier juicio primero escuchar a nuestros compañeros y alumnos para poden entender que les está pasando.
Sin duda la Prudencia y la Discreción son de suma importancia en el día a día del docente tanto con nuestros iguales como con nuestros alumnos, recordemos que ellos toman de nosotros los hechos y que es la mejor forma de educar tanto en conocimiento como cristianamente.
La Humildad es algo que no podemos dejar de lado ya que gracias a ella podemos mantener los pies sobre la tierra, recuerdo una frase que me gusta mucho, “siempre habrá personas arriba y debajo de ti” por lo tanto debes tratar a lo demás como quieras ser tratado, por esto frente a nuestros alumnos y compañeros debemos ser justos y no actuar solo por si me caes bien o no y es una gran responsabilidad la labor que desarrollamos.
Deso que tengan un feliz descanso.
Paty Zaldivar
El comentario del 14 noviembre de 2010 a las 22:14 es de Olivia Mora. Omití mi nombre
ResponderBorrarDesde mi punto de vista, considera que la formación de los seres humanos, debe girar en torno a todos los principios que giran en torno a los valores humanos, los cuales están contenidos en las enseñanzas de las escuelas cristianas.
ResponderBorrarDe manera particular, convivo con las ideas de las actitudes de los docentes frente a los alumnos, ya que dependería de ello, para que los resultados sean congruentes con os objetivos que se persiguen. Uno de los párrafos a los que le encuentro mayor significado es el siguiente:
“Para dar siempre buenos ejemplos, hacer eficaz su acción sobre los niños y corresponder a las miras de Dios respecto de ellos, los Hermanos de las Escuelas Cristianas se esforzarán por perfeccionar en sí las virtudes y las prendas del educador perfecto: la piedad, la mansedumbre, la firmeza, la constancia, la gravedad, el silencia, la vigilancia, la cordura, el saber y la generosidad.”
En ésta líneas, puedo encontrar la verdadera razón del ser docente y asimilo la gran responsabilidad que se tiene frente a los seres humanos que el día de mañana estarán formando nuevas familias y fungirán en cierto momento como educadores de otros seres humanos.
Por mi parte son algunas de las practicas que trato de llevar a cabo ya que como madre de familia considero que son educadora de mis propios hijos y es a través de ellos que trascenderá mi ejemplo.
Los principios que siempre procuro poner en practica, son los de la cortesía, la piedad, la prudencia la humildad y otros; la manera de hacerlo, es hablando de manera adecuada a cada uno de los alumnos y tratándolos como seres humanos capaces de tomar sus propias decisiones y expresarlas desde su muy particular punto de vista, trato de ser guía de enseñanza, siendo humilde al aceptar que todos los seres humanos estamos en constante evolución y que cada día estamos aprendiendo algo nuevo.
Trato de escuchar a todos con paciencia y contestar a todas sus dudas con cordura y mesura, cuando los cuestionamientos son referente a algún tema que no domino, pido que me permitan investigarlo de manera que les pueda contestar con algún fundamento o trato de dar referencias de las fuentes donde pueden dirigirse para obtener mayor información.
Por otra parte considero que uno de los valores que jamás deben perderse de vista, es el respeto ya que a partir de él podrán obtenerse innumerables beneficios.
Creo que sigo en constante crecimiento y que día con día hay algo nuevo que aprender pero sobre todo reconozco que esta profesión cada día me da grandes satisfacciones y me enfrenta a nuevos retos que con estoy dispuesta a enfrentar, ya que a partir de ellos creceré como ser humano, docente, madre de familia, etc.
Nuestro Santo Fundador en la Guía de las Escuelas Cristianas se refiere a la cortesía, del buen ejemplo, de la piedad, la prudencia, discreción y humildad como virtudes del buen maestro.
ResponderBorrarEn cada apartado nos invita a practicarlas con los jóvenes estudiantes.
Las virtudes antes mencionadas son recomendaciones para ser un educador modelo en las escuelas cristianos.
¿De qué manera estos elementos forman parte de mi práctica docente?
San Juan Bautista de La Salle nos indica que el ejemplo es el primero, el más general, el más poderoso de los medios de enseñanza y que nada puede suplirlo. Nos exhorta a ser congruentes entre lo que decimos y lo que hacemos.
Considero que el punto de partida, es tener claro el objetivo que tengamos hacia con nuestros alumnos, al inicio de cada semestre cada uno de nosotros se propone una meta o un objetivo para que los alumnos obtengan un aprendizaje significativo, y conforme avanza el semestre uno emplea diferentes medios para lograrlo, (prudencia) y varias veces hacemos un alto para reflexionar si están funcionando o tenemos que cambiar.
Actualmente, el sistema basado en competencias, nos exige que los docentes perfeccionemos las virtudes antes mencionadas, para guiar a que los jóvenes den respuestas acertadas a las necesidades de su sociedad.
Un aspecto importante, es el compromiso que uno tiene con la labor que uno realiza diariamente, no consiste solo en ir y transmitir conocimientos; si no en dejar algo más y realmente preparar o guiar a los jóvenes en los ámbitos intelectuales y morales; para que ellos puedan desenvolverse con éxito en una sociedad tan compleja y competitiva.
Lina Medina Ibarra
Luego de haber leído los principios rectores expuestos en la guía de las escuelas cristianas sobre las virtudes que debe cultivar un educador, entendí que si bien la mayor parte de dichas virtudes y actitudes las he realizando de manera elemental, no las he aplicado con el entendimiento y la convicción con que lo haría un verdadero educador lasallista.
ResponderBorrarHUMILDAD
Respecto a la virtud de la humildad me propongo, a partir de hoy, entregar todo de mí a quienes comparten conmigo las aulas, aunque ellos y ellas en ocasiones no me lo reconozcan o sean indiferentes ello. Lo hago no buscando el reconocimiento, el elogio o la fama; sino con la finalidad de enaltecer mi trabajo. He aprendido, que con la oración y la reflexión inicial de cada clase, cuanto más grandes somos en humildad, más cerca estamos de Dios, por eso, trato de dar testimonio de reconocimiento de la existencia de un ser supremo, merecedor de mi más completa y absoluta entrega.
PIEDAD
Pondré todo mi empeño en manifestarle a mis alumnos todo el amor que siento hacia ellos, expresarles mis sentimientos, con la finalidad de crear un clima más agradable y propicio para el dialogo, la comunicación y el conocimiento. Durante mis clases, tratare siempre de no depender solamente de mis conocimientos, ni sujetarme a mis propias opiniones, pues ahora sé que la piedad es más inteligente que el odio, y estoy convencido que si voy por el mundo con una mirada amistosa, seguro lograré hacer mejores estudiantes.
PRUDENCIA
Desde muy pequeño me enseñaron que la prudencia es el más preciado de todos los bienes al que cualquier ser humano puede aspirar. Como maestro lasallista, mi más firme convicción será evitar a toda costa ser impulsivo, razonar y tomar decisiones lo más acertadas posibles. Para ello, redoblaré esfuerzos no solo por conocer los temas y programas de las materias escolares, sino las necesidades y expectativas de mis alumnos.
CORTESÍA
Estudios psicosociales ha demostrado que los actos de cortesía responden a normas y a códigos sociales de comportamiento y que los efectos que tiene en las relaciones interpersonales generalmente son positivos, lo que hace que ésta actitud, más que un recurso, sea en sí misma una estrategia para el logro de metas.
Puede ser que actualmente algunas personas piensen que la cortesía es una moda antigua, sin embargo estoy convencido de que es una cuestión de conciencia social, por eso seguiré promoviendo e impulsando entre mis alumnos y compañeros, todos aquellos actos de cortesía que mejoren la convivencia diaria no sólo en el ámbito de la preparatoria Universidad La Salle Nezahualcóyotl, sino en todos los lugares y sitios en donde me encuentre.
David Franco
De virtudes prácticas y prácticas virtudes
ResponderBorrarDe las propuestas más sustanciales de Jesucristo por su paso por esta tierra fue la de enseñar con el ejemplo. El puente entre las palabras y los hechos concretos, no fue con Jesús, en sentido estricto, un innovación, ya los griegos y muy en especial Aristóteles señalaba la necesidad de un pensamiento práctico que tuviera los pies en la tierra, lejos de mundo abstracto de las ideas; ya que éstas, lejos de los sentidos, tienen un carácter inmutable, expresión del bien y del alma. Demócrito fue de los primeros en hacer una crítica aguda de las limitaciones propias de estos procedimientos del conocimiento, y señala: “los sentidos hablan a la razón, la cual en tanto se cree superior a ellos: “Pobre razón, de nosotros recibiste los argumentos, y quieres derrotarnos con ellos”.
Jesucristo en acción, deja atrás la posible separación artificial, y conecta ambas esferas; en buena medida comenzó a considerarse al hombre como un mundo en sí, como un pequeño cosmos en donde la principal misión consiste en mantener el orden y la paz.
La libertad de elección y acción permiten al hombre ejercer las virtudes humanas que sólo pueden existir si se proyectan hacia y con los otros. El principio de enseñanza cristiana que se funda en el ejemplo proviene de esta conjunción.
El maestro con su ejemplo de acción en las virtudes cristianas, hace las veces de ese gran generador de acciones virtuosas que animan el bien y la armonía en los hombres; fundadas en la razón y en el hacer práctico.
Nada es más significativo para un joven estudiante que aquella virtud que es práctica y concreta, que tiene mundo y existencia, y que además induce a la belleza, a la paz armoniosa del bien recibido.
Roberto Martínez Hernández
La cortesía es una característica de las relaciones sociales, es vencer un individualismo y promover la fraternidad, en la familia, en calle y sobre todo en la escuela. La cortesía es la columna vertebral de la convivencia sana entre los seres humanos. En ocasiones las relaciones sociales se caracterizan por una carencia de valores y se ven reflejados en nuestros alumnos; si nos interesa de verdad hacer cambios positivos en nuestros alumnos, debemos cuestionarnos cómo está nuestra cortesía; si somos honestos, generosos y considera
ResponderBorrarEs la prudencia y la discreción características esenciales para un buen ambiente de trabajo, considero que al trabajar la prudencia y la discreción en nosotros mismo, crecemos como persona.
Tenemos que realizar una autoevaluación y preguntarnos de qué manera afectamos a los demás una práctica docente con ausencia de valores, que tanto somos prudentes, discretos, tenemos que estar abiertos a comentarios de otras personas.
Hagamos que nuestras acciones sean las más correctas y dignas de imitar, que seamos nosotros los profesores generadores de un cambio.
Gregorio Alvarez Dionicio
De las virtudes docentes en el la sallismo.
ResponderBorrarUna de las reflexiones inmediatas ante el concepto de virtud tiene su origen en el pensamiento aristotélico "las virtudes, en cambio, las adquirimos ejercitándonos primero en ellas, como pasa también en las artes y oficios". Es decir, la reflexión necesariamnete nos conduce a caer en cuenta de que la virtud se trabaja, se gana, se adquiere. No nacemos siendo virtuosos, el justo medio o el punto medio de equilibrio se alcanza, se logra como lo hemos dicho ya. Además, tenemos que agregar el problema de la libertad, ya que por nuestro ser libres es que podemos tender a la virtud o al vicio, es decir, ejercitar la libertad con base en los valores para alcanzar la virtud y alejarnos del vicio. Así, ya tenemos la triada perfecta: libertad, valores y virtud, donde los valores (lo digno de estima) le dan dirección a la libertad para que tienda al bien, a la verdad y al punto medio, para que tienda a la virtud.
Si acompañamos y hacemos una reflexión paralela entre De La Salle y Aristóteles, encontramos que entonces el maestro lo primero que tiene que ejercitar es la virtud, para después fundamentar su pedagogía en el ejemplo "su pedagogía debe resplandecer a los ojos de los niñon". Sin olvidar que el medio de transmisión de ese ejemplo es el amor: una pedagogía de la virtud fundada en el ejemplo y el amor.
Por último, tenemos que caer en cuenta de la importancia y naturaleza de los valores la sallistas, ya que estos nos permitirán moldear la forma de ser de los docentes y los alumnos, es decir, los valores forman un caracter y un hábito la sallista, forman una educación en virtud como valores vividos.
Iván Córdova
La forma en cómo se trata al joven desde la perspectiva educativa y desde la perspectiva humana, es un don que cada uno de nosotros los profesores tiende a utilizar según su personalidad o sensibilidad de trato. Cuando uno tiene estos dones bien claros y cimentados hacia los demás (los alumnos) el resultado de la enseñanza y trato, siempre será favorable por las dos partes, ya que el tener buena confianza con los jóvenes, nos es mucho más fácil poder ayudar en problemas no solo académicos sino también personales.
ResponderBorrarEs importante saber tratar a los alumnos desde estos caminos, solo asi sabremos que estamos educando personas con sentimientos y no solo personas con obligación de aprender de forma pedagógica.
Algo también muy importante dentro de la enseñanza es, tener la suficiente ética laboral para desempeñar en verdad todas las actividades para las que estamos encomendados, esto es, cuando el joven se da cuenta de que en verdad se desempeña la labor de “profesor” de forma subconsciente, toma también su papel como estudiante, es allí cuando estamos haciendo bien nuestra labor, ya que el joven se da cuenta de cuál es la obligación de cada parte, tanto del profesor como del alumno.
Uno como profesor tiene la obligación de ser como quisiéramos o como exigimos que sean los alumnos.
El hablar de prudencia, discreción y humildad, es hablar de aquellos valores morales que se tienen bien cimentados dentro del yo interno, dentro de la fe y mis ganas de estar bien conmigo mismo primero para posteriormente estar bien con los demás, con el corazón, con la mente. Estos valores nos determinan el buen trato hacia los demás, hacia el exterior desde el corazón y mente hacia el que está enfrente. Cuando se desvirtúan estos valores es cuando las cosas se realizan de forma inadecuada. Allí es cuando comenzamos a realizar actos que no deberíamos, pero que la personalidad de cada uno nos lleva a los actos que posiblemente no quisiéramos.
Atte.
JOSÉ ALBERTO ARELLANO LÓPEZ
El ser un docente y compañero lasallista, implica la práctica de un sinfín de valores, los cuales reflejen su calidad humana, no sólo en la escuela, sino que trasciendan en casa y en todo lugar que éste frecuente. Sin embargo es menester en este momento aludir a los valores primordiales en el ámbito laboral.
ResponderBorrarEs bueno recordar que la coherencia en lo que hace el docente será el inicio de la credibilidad tanto para los alumnos como para sus compañeros, aunada a ésta se encuentra la práctica de la piedad y ello consiste en no sólo dar “golpes de pecho” cuando nos ven los superiores, sino de ser testimonio de una gran fe, sobre todo cuando se pide que se hagan obras de caridad, como por ejemplo para las misiones o para los enfermos, nosotros debemos ser quienes incitemos a los estudiantes a actuar, recordemos que la fe sin obras es una fe muerta.
Dando testimonio de tu ser persona, es como se motiva, ello generará en los demás, alumnos y compañeros, un sentido de filiación y se engrandecerá si te muestras accesible, humilde, sencillo, pues te verán como un sujeto alcanzable que no busca más que ser con y entre los demás.
Y por lo demás la paciencia, la discreción y la prudencia te llenarán de amigos y por lo mismo te mostrarás como un sujeto en el cual se puede confiar. No importando si eres el mejor o peor maestro, recuerda que antes de ser esto, se es persona.
Gracias a todos los que contrato amable y sinceridad se dirigen a mi persona y la entienden por el simple hecho de saberse humanos. Gracias también a los alumnos que Dios nos ha llevado a las aulas poruqe de ellos aprenderemos infinidad de valores, ya que ellos se manifiestan sinceros y libres de expresar lo que ven y sienten.
Oliverio Carbajal Zaragoza
De la cortesía: es interesante el planteamiento que hace la Guía de las Escuelas, por que actualmente esa reglas ya no se toman en cuenta, en ocasiones ni en el propio hogar, que es donde debe iniciarse. En lo particular las recomendaciones que hace las llevo a cabo en el aula y trato de dar el ejemplo tanto de vestir con sencillez así como el buen trato con mis compañeros de trabajo como con los alumnos, lo que no he implementado y quizás sea conveniente, es sobre el porte, el buen parecer y la moderación que ha de observarse en las comidas y el curso guiado de urbanidad en forma más explicita y activa.
ResponderBorrarDe las virtudes y prendas del maestro: Coincido que el ejemplo es el primero, el más general y el más poderoso medio de enseñanza, pero hay que ver que lo que rodea al adolescente el precisamente el mal ejemplo, en el hogar, en el medio en lo global, aunque uno como educador trate de dar ese buen ejemplo, la sociedad distorsiona ese mensaje y lo transforma para convertir a os jóvenes en grotescos seres maleducados, pues no imitan lo bueno o legitimo, sino lo que les produce placer. No considero poseer todas las virtudes y prendas del educador perfecto pero trato de seguirlas y sobre todo dando mi mejor ejemplo.
Con respecto a la piedad, no es sencillo tocar la temática de oraciones, lecturas piadosas, confesión y asistencia al templo a jóvenes que no tienen un antecedente de seguimiento espiritual religioso, ya que en la preparatoria los alumnos vienen de diferentes escuelas que no tocan para nada esta temática e inclusive, las mismas familias no inculcan esta actividad espiritual tan importante; sin embargo como lo pide el programa, se han incluido contenidos generales de la doctrina católica y los alumnos escuchan y guardan respeto aunque no la practiquen del todo y eso es un gran avance. Han participado en colectas, misiones, movimientos juveniles lasallistas y algunos se preparan para hacer su primera comunión. En el Taller de Escuela para Padres se incluye un apartado relacionado con Psicopedagogía y otro con la temática pastoral y esto motiva que hasta los padres toman conciencia de lo importante que es tomar en cuenta la piedad en nuestra vida diaria.
De la prudencia y la discreción considero que dentro de mi práctica docente trato de cumplir con lo que se espera como profesor, pues preparo mis clases, planteo preguntas, propicio que los alumnos en todo momento participen y aporten sus conocimientos previos, utilicen estrategias de enseñanza-aprendizaje y lean escribiendo comentarios de sus lecturas. Cuando tengo que hablar con alguno de ellos, lo hago en las bancas del patio central, pues mi intención es que haya claridad y que no tengo otra intención que la de orientar el sano desarrollo intelectual, físico, social, emocional y espiritual de mis alumnos respetando su dignidad como personas.
Con respecto al tema siguiente considero ser una persona humilde y modesta que trata de seguir y mostrar con el ejemplo, como laico, de seguir los pasos de Cristo y aunque no me considero virtuoso, mi creencia en Dios es total y así se la manifiesto, sin perjuicios a mis alumnos. Con las autoridades escolares no tengo problema alguno, pues siempre me han a poyado cuando las necesito y trato de corregir lo que a su juicio hay que corregir.
Miguel Ángel Márquez salazar
Estas actividades en el blog me han servido mucho, ya que es una especie de aprendizaje retroactivo en el que todos nos apoyamos para ser mejores: personas, docentes, seres humanos, cristianos, etc.
ResponderBorrarEn nuestro papel como docentes, creo que lo más difícil es educar a las nuevas generaciones, mas aun cuando son adolecentes, ya que experimentan muchos cambios tanto en su cuerpo como en su forma de pensar, es algo que tanto los padres como nosotros los maestros sentimos.
En lo personal el educar no solo se trata de transmitir mis conocimientos a los jóvenes sino también forjarles valores que contribuyan a su madurez humana, y en nuestro caso también cristiana. Valores que los humanicen, que les hagan ser personas, buenos católicos, ser felices en su vida.
Como aspecto más interesante de la lectura, mencionaría cuando se nos habla de humildad, la cual es uno de los valores más importantes que puede tener un ser humano, una persona que es humilde, se gana el cariño, aprecio y respeto de quienes lo rodean, es difícil encontrar a una persona que sea 100% humilde en todas las facetas de su vida, es por eso que nosotros como docentes debemos de esforzarnos en demasía para lograr ser más humildes de lo que ya seamos.
Un aspecto importante en la educación es la motivación que exista dentro del aula, tanto por mi parte como por parte de los alumnos, la motivación, como la propia palabra implica es un reto. Mitad de la vida de los estudiantes la pasan en las aulas y por lo tanto nuestra interacción como docentes marca la vida de los estudiantes que pasan por nuestras manos, somos constructores de vidas, en gran parte ayudamos a formar los cimientos de un profesionista, de un padre, de un ser humano católico, perteneciente a una sociedad en la cual va a volcar lo que está aprendiendo y deberá ayudarla a ser una mejor sociedad.
Laura Cristina Calderón Méndez
El quehacer docente es una de las disciplinas mas apasionantes y complejas que pudieran existir, primeramente para poderla ejercer se debe tener un real gusto y cariño por enseñar, pero sobre todo se debe ser consciente de los valores y virtudes que deberá enaltecer en el desempeño de su función como docente, una de las principales virtudes es la prudencia ya que se debe mantener, de preferencia, excelentes relaciones con los estudiantes, de forma leal, autentica y sin caer en exageraciones que confundan o dañen, así mismo debe, preocuparse por el aprendizaje sistemático de los estudiantes, orientándolos en sus tareas, preocuparse por la formación integral (principios morales, estéticos, éticos, académicos) de estos, además se debe considerar a los estudiantes como seres humanos con similares características, derechos y obligaciones. Fomentar los principios de amistad y solidaridad. Contrarrestar el autoritarismo. Fomentar el respeto entre estudiantes y profesor, y entre ellos mismos, en un plano de cortesía y humildad. Tratar a los estudiantes en forma jovial y amena. Utilizar el buen humor como recurso de enseñanza-aprendizaje. Desarrollar un don de mando sin caer en posiciones autoritarias y militares. Debemos recordar que, antes que todo, somos seres humanos con defectos y virtudes antes que académicos. Infundir con humildad respeto y confianza en los estudiantes, pero sin caer en la soberbia malsana que genere miedo y odio que pudieran viciar la relación con los alumnos, es importante resaltar que los valores y virtudes que un docente debe ejercer están basados en principios humanistas, de buenas costumbres y sobre todo estos van aparejados de la palabra de dios. Un docente debe mostrar mucho interés en la individualidad de los estudiantes: sus problemas y éxitos. Sus preferencias y expectativas y sabérselos reconocer pero con la suficiente discreción que no motive que el alumno pierda le piso y este genere expectativas falsas y fuera de la realidad.
ResponderBorraratte. Vicente Hernández Cruz